Medicina de buceo y respuesta a emergencias

La medicina de buceo o medicina subacuática es aquella que se encarga de prevenir y curar aquellos problemas de salud relacionados con el buceo. Tanto la apnea como el buceo autónomo son deportes cada vez más populares y no es de extrañar, pues nos permiten adentrarnos en lo desconocido, vivir aventuras y tener experiencias únicas. Además, la tecnología ha avanzado tanto que ha convertido al buceo en una actividad mucho más segura que en sus comienzos. Pero seamos sinceros, en lo que respecta al ser humano, no existe el riesgo cero cuando se sumerge bajo el agua. De ahí la importancia de la medicina del buceo.

Algunas personas tienen condiciones de salud específicas por las que el buceo les está contraindicado. Por eso, se solicita a aquellos que están dentro de un grupo de riesgo que acudan a un médico especializado en medicina subacuática. Él evaluará su estado de salud para bucear. Pero no adelantemos acontecimientos.

¿Qué vamos a aprender sobre medicina del buceo en este artículo?

1. ¿Qué es la medicina del buceo?

La Medicina Subacuática o medicina del buceo se centra en los cambios fisiológicos y problemas de salud relacionados con el buceo. Hay órganos que se ven especialmente afectados por este deporte y deben estar en un estado de salud óptimo si se desea practicar este deporte. Algunos de ellos son: los oídos, senos paranasales, pulmones y sistema vascular.

La Medicina Hiperbárica también se enfoca en curar enfermedades relacionadas con el buceo, la navegación aérea y aeroespacial, conocidas como patologías disbáricas.

Una rama de la medicina del buceo es la medicina Hiperbárica, que implica administrar oxígeno a alta presión para tratar diversas enfermedades. Se utilizan cámaras hiperbáricas para crear este ambiente y sus efectos son tan beneficiosos para la salud que ahora se utiliza para tratar otras enfermedades.

Para practicar la Medicina Subacuática se requiere formación especializada y una titulación específica obtenida a través de una maestría universitaria.

2. El médico de buceo

Los médicos de buceo son especialistas en un área única de la medicina que abarca tanto la salud submarina como la hiperbárica. Su conocimiento se extiende desde entender cómo el cuerpo humano reacciona bajo el agua y a diferentes niveles de presión, hasta dominar el equipo y los procedimientos utilizados en el buceo. Para convertirse en médico de buceo, se requiere una formación especializada y, en muchos casos, la realización de un doctorado en medicina de buceo. Estos profesionales no solo evalúan si una persona está apta para bucear, sino que también están capacitados para diagnosticar y tratar accidentes relacionados con el buceo, como la enfermedad descompresiva.

Además, pueden brindar atención médica de emergencia tanto en la superficie como dentro de cámaras de recompresión, lo que los convierte en una pieza fundamental para garantizar la seguridad y la salud de los buceadores.

3. Examen médico previo al buceo

La práctica del buceo recreativo, ya sea con SCUBA o en apnea, entraña muy pocos riesgos para la salud de la mayoría de las personas, pero ciertas condiciones físicas pueden aumentarlos, a veces de manera no evidente para quienes desean convertirse en buceadores.

Por ello, es crucial que los médicos de buceo realicen un examen exhaustivo para detectar estas condiciones. Algunas de ellas son:

Salud mental. Es crucial evaluar si un candidato tiene la capacidad para aprender y aplicar conocimientos teóricos de buceo, además de observar su comportamiento en el entorno de entrenamiento.

El sistema otorrinolaringológico es vital para los buceadores, ya que cualquier desequilibrio de presión durante el ascenso y descenso puede provocar desde molestias hasta lesiones graves. El oído medio y los senos paranasales deben equilibrarse correctamente para evitar rupturas y complicaciones. Además, es crucial que la laringe y la faringe estén libres de obstrucciones para garantizar una adecuada respiración bajo el agua.

Condiciones médicas relacionadas con el sistema cardiovascular, gastrointestinal, hematológico, endocrino y neurológico, ya que pueden afectar la seguridad del buceador. Por ejemplo, enfermedades cardíacas, trastornos de la coagulación o epilepsia pueden representar riesgos significativos para la salud durante el buceo.

En resumen, la evaluación médica de los buceadores potenciales debe ser integral y personalizada, considerando todos estos aspectos para garantizar la seguridad y el bienestar de los individuos durante las inmersiones.

Por eso, la evaluación de la aptitud para el buceo incluye una historia clínica completa y un examen físico detallado, un electrocardiograma en reposo, pruebas de función pulmonar y una evaluación del esfuerzo que se realiza generalmente con un ergómetro de bicicleta o una cinta de correr.

Recuerda: la mayoría de las compañías de seguros y operadores de buceo piden una certificación médica para el buceo.

4. Emergencias médicas en el buceo

Las emergencias médicas en el buceo son rarísimas. Se estima que ocurren solo 2 de cada 10,000 buceos. Sin embargo, hay que estar prevenidos porque pueden tener graves consecuencias. Entre estas emergencias, se encuentran la enfermedad por descompresión, la narcosis por nitrógeno (en buceo profundo), la toxicidad del oxígeno (en profundidades extremas) y el barotrauma (en ascensos rápidos). Cuyo tratamiento, a menudo, implica el suministro de oxígeno nada más ascender y la terapia con oxígeno hiperbárico en cámaras de descompresión una vez en tierra.

Sin embargo, es importante destacar que la disponibilidad de tratamiento puede ser limitada en algunos lugares, lo que subraya la importancia de la prevención y la educación en la comunidad de buceo. Por esa razón, los instructores y divemasters de buceo recreativo están obligados a tener conocimientos y competencias en rescate y primeros auxilios, incluyendo la certificación en reanimación cardiopulmonar y administración de oxígeno normobárico.

En el buceo comercial, el equipo de personas suele incluir un médico de buceo o técnico médico de buceo, que es el encargado de brindar primeros auxilios avanzados. Ellos están preparados para administrar tratamiento de emergencia, asistir a procedimientos de descompresión y proporcionar atención en una cámara hiperbárica en caso de emergencia.

En Dressel Divers tenemos un plan completo para situaciones de emergencia. Todos nuestros barcos de buceo y centros están equipados con equipos de oxígeno.

5. Seguro médico de buceo

El avance tecnológico en el ámbito del buceo ha permitido elevar los estándares de seguridad, convirtiéndolo en una actividad recreativa de gran popularidad. No obstante, los riesgos persisten. Por ello, contar con un seguro de buceo no solo es imperativo, sino en muchos lugares del mundo, obligatorio.

En estas zonas, los centros de buceo no autorizan la inmersión sin la presentación del respectivo seguro médico de buceo, acompañado de la tarjeta de certificación y el reconocimiento médico.

Aunque los peligros de padecer enfermedades relacionadas con la descompresión, barotrauma o embolia gaseosa en el buceo recreativo son mínimos, enfrentar los costos médicos en caso de una emergencia de este tipo podría resultar en un grave desafío económico.

Por ejemplo, de acuerdo con la Asociación de Medicina Subacuática e Hiperbárica y Divers Alert Network  (DAN), el tratamiento en cámara hiperbárica puede tener un costo que oscila entre 330 y 1000 dólares por hora, a lo que hay que sumar los gastos en medicinas y honorarios médicos. En el caso de tener un imprevisto, tener un seguro médico es vital.

Los detalles de la cobertura de seguros para buceo varían de una compañía a otra, por lo que recomendamos revisar los términos antes de contratar un seguro. Algunos aspectos cruciales que debe incluir tu seguro son:

• El costo del transporte desde el lugar de inmersión hasta el hospital o la cámara hiperbárica.
• Gastos médicos y duración de la asistencia.
• Gastos de viaje después de un accidente de buceo.
• Pérdida, robo o daño del equipo.

Es fundamental tener en cuenta las restricciones de tu seguro de buceo. Por ejemplo, algunas pólizas no cubren a personas mayores de 70 años o a buceadores con condiciones médicas preexistentes como diabetes o asma, incluso si tienen un certificado médico actualizado para bucear.

En resumen, el buceo recreativo es una actividad emocionante y gratificante que tiene que disfrutarse con salud. Es importante que los buceadores potenciales sean evaluados y asesorados adecuadamente por profesionales médicos con experiencia en medicina de buceo para garantizar una experiencia segura y satisfactoria bajo el